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60 años de la televisión colombiana

Colombia al igual que otros países se une a la celebración de la llegada  del medio de comunicación audiovisual.

Una breve reseña de la historia de la televisión nacional

Por: Gabriel Acevedo Torres/ Twitter:gacevedot25

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Desde sus comienzos fue el espacio para proyectar la esencia de un pueblo rico en cultura, noticias y sueños. Es un aliado que acompaña a cada familia y es parte del crecimiento de generaciones que se han pintado de colores sobre eventos que enorgullecen a la nación. No fue un sustituto, sino una opción más de informarse mediante imágenes.

Hoy la televisión colombiana celebra sus 60 años de desarrollo con triunfos y vicisitudes. Colombia se una a la celebración de muchos países latinoamericano que festejan lo que para muchos marcó la historia por el contenido, calidad y eventos presentados a través de la pantalla chica.

Con propuestas básicas de alfabetización audiovisual, educación ambiental y estado, la televisión Colombiana encendió en los corazones de la ciudadanía hacia un mejor porvenir en tiempos difíciles donde la lucha de la droga y el gobierno ocupaban las primeras planas de los principales rotativos nacionales. Es por eso que la expansión de la señal televisiva se dio en poco tiempo y llego a más ciudades como por ejemplo de Bogotá hasta Cali y por consiguiente a todo Colombia.

Un noticiero internacional fue la primera imagen plasmada en la televisión para el 1954 que a su vez  brindaba un espacio a la música clásica bajo los estándares del estado para que  nuevos televidentes conocieran sobre la cultura del nuevo integrante de la familia en las salas, cuartos y empresas. Pero no todo fue cultural, fue también en sus inicios el vocero principal del gobierno para mensajes sobre la guerra que se enfrentaba entre naciones en contra de Colombia.

El reto del estado con la televisión fue la adaptación del televidente al fenómeno que ya en Estados Unidos era un éxito. Cosa que se logró a pesar del problema económico que enfrentaba la emisora del gobierno.

Luego canales como TeleTigre, Caracol TV y regionales como TeleAntioquia le dieron variedad al espectador para ofrecerle una experiencia variada en programación y contextos que dejaba el deseo de seguir conociendo al mundo en una dimensión pequeña en una pantalla en las casas. Sin duda ya el público colombiano había adoptado la disciplina televisiva al punto que para el 1987 se empezó a ofrecer servicio de cable tv en Bogotá.

Hoy día en Colombia lideran las televisoras privadas, ofreciéndole al público programación realizada en el país como extranjeras como las novelas mexicanas. Haciendo un balance en programación para amparar a varios sectores, edades y sexo en su audiencias. En los últimos 10 años se han catapultado las producciones colombianas en “reality show” que pone en perspectiva la vida de candidatos a ganar premios de talento, dinero o belleza, cosa que ha gustado al colectivo.

Los cambios en la televisión colombiana en estos últimos 60 años son el reflejo de los distintos momentos históricos del ámbito político y social del país y en el mundo, para lo cual la televisión más que un medio de entretenimiento y de comunicación, es un fenómeno social, un documento histórico, un elemento activo en la construcción de la memoria colectiva para todos.

Un concurso llamado Nuestra Belleza Latina

Un “reality show” diferente en el que se mide la calidad de comunicar de las mises en los medios de comunicación..
Colombia ha sido representado en el “reality show” de belleza en los Estados Unidos.

por Gabriel Acevedo Torres

Twitter: gacevedot25

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Altura, porte y belleza, son los elementos clásicos que han de representar una señorita que se encuentre participando en un certamen de belleza. El fin de estas candidatas a reinas en definitiva es representar la estética de un país, zona o pueblo referente a belleza .

Al parecer este no es el fin de un concurso que por siete año ha generado millones en audiencia en todos los Estados Unidos, Venezuela, México y Puerto Rico, este lo es el “reality show” Nuestra Belleza Latina trasmitido por Univision . Aunque este concurso no se aleja de las características principales de lo que debe ser una reina de belleza, su meta no es exactamente esa, es quien pueda sobrevivir al mundo de la comunicación en los Estados Unidos.

Univision es la cadena norteamericana más importante para los hispanos hablante en toda la nación, siendo una plataforma de medios que representa millones de dólares en ganancias y expansión en América. Es por eso que el personal de la cadena que sea conductor o imagen del mismo se les trata como toda una celebridad, como si Miami fuera el Hollywood de los latinos en Estados Unidos.  Precisamente es por eso que este concurso de belleza ocupa este espacio en la televisión ya que se encarga de coronar a una “miss” para que sea la imagen de la compañía en diferentes programas de televisión, comerciales y eventos de la televisora con bases mexicanas.

Nuestra Belleza Latina cuenta con la dinámica de audiciones en todo los Estados Unidos en buscar chicas que puedan tener la proyección necesaria para ser imagen de la televisión hispana.  El programa tiene una duración de tres meses con dos horas de trasmisión semanal en el que de 60 chicas que se escogen en las audiciones, solo doce pasan a la etapa final de vivir en la “mansión de la belleza”, fase en la que semanalmente se va eliminando a la candidata con menor desempeño o menor acumulación de voto de la teleaudiencia. La ganadora la escoge el público con el voto mediante llamadas telefónicas, mensajes de textos y por “hashtag” (#) en las páginas sociales con el nombre de la candidata.

Las candidatas para ostentar la corona de la televisora no llevan cintas de sus países y mucho menos por estados aunque mencionan con orgullo su país de origen. El único requerimiento es ser latina con ciudadanía de los Estos Unidos para poder participar; e incluso pueden ser madres o casadas a pesar que esta última exigencia  pasa por mala suerte ya que las que han ganado la corona que están casadas terminan solteras, al parecer la carga laboral termina afectando toda relación de las reinas e incluso de las candidatas.

El show con las 12 finalistas consistes en realizar retos de fotografías, talento y presentación frente a cámaras de televisión. A veces los retos suelen ser ridículos al tiempo que ponen en aprietos a las candidatas frente a la teleaudiencia. Por ejemplo el poner candidatas caribeñas a narrar en vivo un juego de soccer o futbol cuando el deporte nacional del Caribe lo es el béisbol y situar a participantes con mala pronunciación (porque han vivido en los Estados Unidos cosa que deteriora el español) a  leer un telepronter en una trotadora con tacones a una velocidad de les dificulta enl caminar en tacones altos. Al parecer estas situaciones que crean risa a los espectadores y por consiguiente un aumento en audiencia para que el programa sea un mediático.

La transmisión toma peso en el mundo  de la belleza porque cuenta con tres jurados que so pilares en el mundo de la belleza en América Latina. La ex Miss Universo mexicana y también dueña de la franquicia de Miss México, Lupita Jones al igual que el actor y cantante cubano, Jean Carlos Canela, forman parte del jurado pero el de la chispa del panel es el encargado de llevar a Venezuela como el primer país en ganar 20 coronas internacionales y mejor conocido como el Zar de la Belleza, Osmel Sousa, quien con sus ocurrencias ha llevado al concurso a ser un show mediático y con gracia.

Con las recomendaciones y comentarios positivos o negativos de Sousa en el certamen, son los determinante para que el público seleccione la ganadora que representará a la mujer latina en Univision por un año y quién ganará premios valorados en un cuarto de millón de dólares ($250,000).

Colombia ha tenido su participación en el concurso pero no ha llegado a ganar la corona. Sus posibilidades de ostentar la corona con una colombiana fueron para el 2010 con Carolina Ramírez quien quedo como primera finalista, perdiendo con la mexicana Ana Patricia quien se llevó la corona ese año. Este año Colombia tuvo su representación de Valeria Moreno pero que fue eliminada por el restante de las candidatas por mala convivencia en la competencia. El año pasado participo la ex Miss Mundo Colombia 2012, Bárbara Turbay quedando quinta posición.

Nuestra Belleza se ha convertido en un trampolín para trabajar en los medios hispanos en Estados Unidos, tanto en Univision como en otras televisoras que compiten por el público latino. Nunca se pierde de norte lo que es la esencia de una reina de belleza pero en este concurso el ideal es que sea representación digna de una mujer latina que sobrevive a las diferentes vicisitudes en la nación norteamericana. Por lo regular las candidatas a dicha corona han sido indocumentadas, madres solteras o chichas que han vivido sin su familia ya que se encuentran en sus países de origen.

Semanalmente las candidatas para el concurso deben presentar en menos de 5 minutos su proyección, progreso y talento para la televisión para que el jurado emita un comentario simple pero contundente para el público que al fin al cabo tienen la decisión de elegir  de la gran ganadora. Aunque el comentario o el pensar del Zar de la belleza es determinante para augurar la ganadora de la corona ya que ha definido desde los comienzos del concurso las ganadoras de dicho concurso.

El éxito de este tipo de concurso ha sido sumamente marcado en los medios ya que revistas como People en Español selecciona a una de las candidatas para que salga en la edición de los “50 mas bellos”, la revista “Seventeen” ofrece la portada para la candidata ganadora de su reto y la revista Cosmopolitan le promete una edición exclusiva a la ganadora del “reality show”. Las televisoras que compiten por el mercado latino en Estados Unidos debido al éxito de NBL (por sus siglas) han desarrollado concursos de bellezas similares para competir por audiencias con la plataforma de oportunidades en los medios de comunicación para chicas con ganas de ser conductoras de televisión.

A pesar de los estereotipos de las reinas de bellezas, en este concurso se pone a prueba la sensibilidad para cautivar al público, el porte de una mujer luchadora y la proyección necesaria para que pueda ser conductora de televisión para una población que va en crecimiento  poblacional.

Quizás para muchos estas mujeres que ganan dicho concurso son una falsedad ante la sociedad pero muchas veces estas chicas tienen que pasar por pruebas que la hagan merecedora de la corona porque los medios están canonizados y el ambiente suele ser hostil para los que comienzan de cero, pero a estas chicas las preparan para comunicar una imagen que es la que solemos catalogar aceptable frente a una pantalla.

En fin, Nuestra Belleza Latina es un concurso en que se gana por una corona pero se reta para una audiencia en un país con indiferencias.

 

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